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Como mamás Danonino, queremos que nuestros hijos crezcan fuertes y saludables; por ello procuramos cuidarlos y darles lo mejor las 24 horas del día, los siete días de la semana. ¿Qué pasa, entonces, cuando están lejos y no podemos cuidarlos? Luego de dos años en los cuales estuvimos todo el tiempo con nuestros pequeños y tuvimos la gran oportunidad para observar su desarrollo, así como de alimentarlos en casa con comidas llenas de nutrientes, ahora es el momento de que regresen a la escuela para continuar su sano desarrollo.
Ante ello, no podemos evitar pensar en que allá no se alimentarán adecuadamente; sabemos que una cosa es que nuestros pequeños consuman comida recién hecha, nutritiva y servida con el amor de mamá en un ambiente relajado como el hogar, y otra muy diferente el refrigerio que sacarán de su lonchera a la hora del recreo horas después de haberlo preparado, momento en que se distraerán con cualquier cosa y en que nadie supervisará su alimentación tan bien como nosotras.
Hoy es más importante que nunca preparar lunch saludables para nuestros pequeños: de acuerdo con los expertos, un refrigerio adecuado, es decir, lleno de nutrientes y bien balanceado permite mantener un crecimiento adecuado, tener un mejor desempeño escolar, e incluso prevenir problemas como el sobrepeso y la obesidad en nuestros hijos.
¿Qué es un lunch saludable?
Quizá para algunas mamás armar un lunch saludable sea rutinario; sin embargo, es posible que haya quienes lo entiendan sólo a medias. Es muy común pensar que es suficiente tan sólo incluir una fruta en la lonchera de nuestros pequeños para que automáticamente su refrigerio se convierta en un lunch saludable o bien, en el contexto de una dieta restrictiva, sólo incluir un alimento para no saturarlo de comida.
Aunque encontrar el equilibrio a la hora de prepararlos se lee complicado, hacer lunch saludables es sencillo si tomas en cuenta las siguientes recomendaciones:
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Incluye frutas y verduras, un alimento preparado y un lácteo con el fin de proporcionarle la energía necesaria para realizar sus actividades escolares.
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No olvides la hidratación ya que el agua es muy importante para que el cuerpo de tu hijo pequeño funcione correctamente; ten mucho cuidado de no añadir bebidas azucaradas. El agua natural siempre será la mejor opción para incluir en un lunch saludable, pero si tu pequeño no es tan fan de ella, intenta con un té o infusión fría y refrescante..
Estos son tan sólo los básicos, pero aún hay más que necesitas saber para encontrar el balance y así crear los mejores lunch saludables. Si, por ejemplo, en el refrigerio de tu pequeño para el miércoles piensas incluir carbohidratos complejos como tortillas o arroz, ya no añadas pan o galletas.
La lección para preparar lunch saludables aquí es que encuentres un equilibrio a la hora de escoger entre las diferentes opciones de alimentos fuente de carbohidratos, proteínas y grasas saludables; en todo caso, puedes añadir una pequeña colación si tu pequeño te dice que se queda con hambre.
¿Cómo armar un lunch saludable?
Elaborar tus propios lunch saludables es sencillo si tomas en cuenta los puntos anteriores. En todo caso, no olvides que también debes incluir:
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Frutas y verduras: principalmente las favoritas de tus pequeños, ya que les aportan agua, fibra, vitaminas y minerales. Tal es el caso de la manzana, el plátano, el jitomate y el pepino, por mencionar algunas.
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Ciertamente a muy pocos niños les gusta que, como mamás, incluyamos verduras como parte de su lunch saludable; en todo caso puedes incluir espinacas o acelgas trituradas como complemento de su ración de proteína; berenjena, que puedes preparar de diferentes formas; calabaza y zanahoria, por mucho, la predilecta de los niños.
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Los carbohidratos complejos (pan, tortilla, arroz, galletas, avena, granola o amaranto) son la principal fuente de energía para nuestro cuerpo (¡y también para los más pequeños) y son esenciales en lunch saludables para que nuestros hijos tengan un rendimiento escolar adecuado.
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No olvides incluir queso, carne, huevo, lácteos y, en menor medida, embutidos: aportan proteínas que son muy importantes para un lunch saludable ya que participan en funciones vitales de nuestro cuerpo como el transporte de oxígeno.
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Por último, pero no menos importante, siempre debes proveer la hidratación adecuada para tu pequeño. Recuerda siempre priorizar el agua simple.